One Shot "Un baño sorpresa"

Disclaimer: los personajes le pertenecen a Stephanie Meyer, yo sólo los tomé prestados para la realización de este one shot…=D
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Dedicado especialmente para leda, gracias por tu apoyo y ánimos para seguir escribiendo, y también para toda LA BANDITA las quiero chicas son lo mejor =)
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“UN BAÑO SORPRESA”

Summary: después de un día en familia en el campo lo mejor es un reconfortante baño, bueno eso pensaba hasta que me tope con algo inesperado. One Shot : )



Bella Pov

Estaba por volverme loca, mi padre había tenido la “magnifica” idea de salir de día de campo en familia, así que gracias a sus ocurrencias me había perdido un día importante con Edward.

Cuando por fin íbamos llegando a casa le marque a mi novio

-¡mi amor!- contesto muy alegre.

-¿crees que aún haya tiempo para vernos?- le pregunté temerosa a su respuesta.

-amm…creo que puedo hacer lo posible, si en unos 10 minutos nos vemos-

-de acuerdo sirve que me doy un baño, siento como si me hubiera revolcado en el suelo, a Charlie se le ocurrió que una caminata estaría genial por lo que podrás imaginarte que no salía del suelo- su angelical risa se escuchó de fondo

-sí, creo saber perfectamente cómo te fue, ¿pero en verdad tanto cariño le tienes al piso que te encanta estarle dando besos?- me preguntó con burla.

-no es gracioso Edward- lo amenacé, pero sabía que no me temía y la carcajada que soltó me lo comprobó.

-lo siento no lo pude evitar, los celos me matan- dijo con tono fingido

-ed..-

-de acuerdo basta de bromas, nos vemos en un ratito hermosa, te amo-

-yo también te amo- le contesté antes de colgar, me era imposible enojarme con él, pero últimamente se la había pasado burlándose por mis múltiples caídas, de sobra tenía con Emmeth que cada vez que tenía tiempo me recordaba la brutal caída que sufrí cuando jugaba futbol con la familia Cullen

*Flash back*

Era un hermoso día en Forks, raro lo sé pero el sol estaba en todo su esplendor, los rayos iluminaban y daban un calor muy reconfortante, un día anterior había estado haciendo un frío de los mil demonios por lo cual el sol era más que bienvenido, estábamos todos tumbados en el pasto tomando, como dijo Alice, un poco de color, por que según ella estos días no se tenían que desperdiciar.

-seria genial un partidito- exclamo Emmeth rompiendo con la armonía

-sí- grito Jasper y Edward al mismo tiempo, al contrario de las chicas y yo que sólo hicimos cara de asco

-ni lo pienses, no arruinaré mi apariencia por un estúpido juego- exclamo Alice a lo que Rosalie la apoyo

-a mí no es que me importe mi apariencia, pero si quiero vivir más tiempo tengo que evitar todo aquello que ponga en peligro mi vida- dije un poco aterrada ya que los deportes nunca había sido lo mío

-hay mi amor tú siempre tan exagerada, no te preocupes yo estaré para cuidarte – dijo Edward depositando un beso en mi frente y pegándome más a su cuerpo

-solo será un rato- exclamo Emmeth realmente emocionado

-de acuerdo, pero cuando digamos ya es ¡YA!- dijo Rosalie mirando con advertencia a su novio

-si!!- exclamaron los chicos

No sé exactamente cuánto tiempo teníamos jugando, creo que el estarnos divirtiendo tanto había provocado que no nos fijáramos en la hora.

Todo iba tan bien hasta que Emmeth me mandó un pase tan rápido que por no querer que me pegara me moví un poco hacia mi derecha, y con la “gran” coordinación que tenia caí hacia un pequeño barranco que se encontraba en mi dirección, rodé unos cuantos metros raspándome y golpeándome múltiples partes de mi cuerpo, cuando pensé que lo peor había pasado golpee contra una roca la cual me provoco una herida en la frente, los chicos se habían vuelto locos, corrían para todos lados y gritaban pidiendo ayuda, pero era claro que como no estaban coordinados unos chocaban contra los otros, hasta que Edward pensó un poco mas y salió corriendo hacia su casa, ese día estuve internada en el hospital, según que por los múltiples golpes que había recibido querían tenerme checada para que no pasara a mayores, cuando me recuperé Emmeth no paraba de echarme carrilla, me había apodado la ardilla voladora y cada que tenia oportunidad me recordaba ese pequeño incidente.

*Termina flas back*

-hija ¿te quedarás ahí? - dijo mi padre sacándome de mis recuerdos

-no…este… sólo estaba recordando que tengo unas cosas que hacer- mentí un poco, no quería decirle mis verdaderos recuerdos ya que el día que se enteró de mi accidente se puso como loco

Cuando entré a mi casa mi padre tenía una cara extraña, era como si estuviera impaciente por algo pero no entendía el por qué, sin tomarle más importancia subí a mi cuarto, pero cuál fue mi sorpresa que al entrar este estaba tapizado de rosas de todo tipo de colores, miles de globos y en el centro de mi cara una tarjeta enorme en la que sólo pude distinguir lo importante “TE AMO”

-éste fue el verdadero motivo por la salida, no pudimos inventar otro pretexto- se disculpó mi padre a mi espalda, yo aún estaba en shock, sabía que la única persona capaz de todo esto era Edward, ¿pero qué motivo tenia? no cumplía años, mucho menos era un aniversario- el te lo explicará- contestó mi padre a mi pregunta mental, a veces creía que era capaz de leer la mente, pero eso era algo imposible.

Mi padre me dejó sola, y yo no podía moverme aun de mi sitio, esto era lo más hermoso que alguien había hecho por mí, ni siquiera Jake le llegaba, el había sido mi novio y había tenido muchísimos detalles conmigo pero esto que tenía enfrente no se comparaba con nada, cuando por fin recordé como mover mi cuerpo corrí a toda prisa a mi closet, Edward no tardaría en llegar y yo aun no me había aseado, tomé lo primero que encontré y me dirigí hacia la ducha.

Me quité con mucha rapidez mi ropa, prendí la regadera y espere un poco a que el agua caliente saliera por completo, cuando por fin el agua estuvo en su punto sin más tiempo que perder me metí dentro, cuando estaba frente a la regadera unos brazos me sujetaron de la cintura y antes de que pudiera gritar una mano cubrió mi boca

-shhh, no te asustes soy solo yo- exclamó esa persona que sin mirarla sabía perfectamente quien era, su voz tan hermosa era como un canto de ángeles y el simple contacto de sus manos contra mi piel mandaba millones de descargas a mi sistema, poco a poco fue soltando su agarre, beso mi cuello y mordió un poco el lóbulo de mi oreja- me matas cada vez que te encuentro de esta forma, eres tan hermosa- su aliento me golpeó por completo y el sentir sus manos tomar uno de mis pechos provocó que un gemido saliera de mis labios

-¿pero qué?… !Demonios!- medio grité cuando tomo uno de mis pezones y lo pellizco un poco

-sé que no celebramos nada, pero tenía ganas de hacerlo, gracias a dios que se me hizo un poco tarde y pude encontrar esta hermosa vista- me volteó y fue cuando me perdí en su hermosa mirada, tenía los ojos color esmeralda más hermosos que alguna vez habían podido existir, eran únicos, al igual que su sonrisa que a su complemento provocaban que comenzara a hiperventilar.

-gracias…- fue lo único que pude decir antes de que mis labios fueran aprisionados por los suyos, sus besos era un droga para mi sistema, no sabía cómo había podido vivir tanto tiempo sin ellos, cuando el aire comenzó a faltar se separo un poco pegando su frente a la mía y me susurro

-te amo-

-no tanto como te amo yo- le respondí, con urgencia lo sujeté por atrás del cuello y lo jalé hacia mí, su lengua delineó el contorno de mis labios pidiéndome permiso para entrar, y como era de suponerse no se lo negué, era una lucha constante en la cual el mejor vencería, aunque aquí ninguno de los dos se llevaría el trofeo, dejó mis labios un momento en el que comenzó a besar mi cuello y yo por mi parte sólo pude gemir por lo placentero del momento, bajó sus manos hacia mis pechos y los masajeó un poco provocando que mis gemidos subieran de nivel, baje mis manos y fue cuando noté que estaba en las mismas condiciones que las mías, ¡COMPLETAMENTE DESNUDO!, dios este hombre algún día me mataría de la impresión.

Se llevó uno de mis pezones a su boca y comenzó a masajearlo de una manera encantadora, cuando termino con ellos bajo una de sus manos a mi centro y sin pensarlo mucho trazo círculos el punto más sensible de mi anatomía

-tan mojada y lista para mí- exclamó con voz ronca, yo no podía hablar, eran tantas las emociones que me había olvidado de cómo se formulaban las oraciones o simplemente el como provocar que mi boca provocara algún tipo de sonido, metió uno de sus dedos en mi centro provocando que un grito de placer saliera de mis labios- shhh, tu padre nos escuchará- fue en ese momento cuando la duda creció en mi

-como es que entraste aquí sin que mi padre te mirara- como pude lo dije ya que no me daba tregua y sus dedos aun seguían dándome placer, el cual gustosa recibía.

-ya estaba aquí, otra cosa es que hayas sido tan despistada que no te hubieras dado cuenta que estaba detrás de la puerta en el momento que entraste, pero cuando te quería sorprender el sorprendido fui yo al ver como comenzabas a quitarte la ropa- siempre me habían dicho que era despista y en este momento lo había comprobado en todo el sentido de la palabra

-me da gusto que aun estés aquí, ya te extrañaba- no supe si comprendió lo que dije, los primeros signos del orgasmo se estaban haciendo presentes en mi cuerpo y no podía hablar con coherencia

-déjate llevar- susurró en mi oído, y fue el combustible necesario para llegar hasta la cima, para evitar gritar mordí su hombro, aunque creo que utilice un poco mas de fuerza de lo que pretendía y el gemido de placer acompañado con dolor que soltó me lo comprobó.

-lo…siento- dije de forma entrecortada

-no hay por qué sentirlo, eso fue de lo más erótico que has hecho hasta ahorita, aparte creo que yo tengo un poco la culpa- sonrió de lado quitándome la respiración de golpe –respira- dijo de forma burlona

-entonces deja de hacer eso- me quejé un poco a lo que me gané una hermosa carcajada por su parte –bueno en que estábamos- le dije de la forma más seductora que pude, lo cual creo que funcionó ya que dejó de reírse y emitió un gruñido que provocó que de nuevo estuviera a su disposición, comenzó a besarme con fuera y desesperación, y con una rapidez que nunca imagine me giró y provocó que me inclinara hacia enfrente, me sujete de la pared cuando sentí su miembro entrar sin aviso, gemimos al mismo momento, y cuando comenzó con los movimientos mas rápidos no podía evitar gemir y gritar su nombre, salió de mi y antes de que pudiera protestar me volteó y me cargó provocando que mis piernas se enrollaran en sus caderas y que nuestros sexos rozaran. Me levantó un poco más y volvió a entrar en mi, se movía de manera frenética, sus embestidas me estaba volviendo loca, cuando estaba por llegar a la cima por segunda vez le susurré al oído

-vente conmigo- y mordí el lóbulo de su oreja, segundo después sentí como el orgasmo lo alcanzaba y no pude resistirme más y lo acompañe en el viaje tan placentero, el hacer al amor con Edward era de lo más genial que alguna vez pude llegar a imaginar

-eso fue magnífico- le dije cuando nuestras respiraciones volvieron a normalizarse

-magnifico es quedarse corto- me dio un pequeño beso y salió de la regadera, yo por mi parte me puse a enjabonar mi cabello y mi cuerpo, después de todo no había podido asearme, cuando terminé salí de la ducha, sequé bien mi cuerpo y me vestí, cuando entré a mi cuarto estaba Edward ya cambiado recostado en mi cama leyendo la tarjeta que segundos antes estaba depositada en el lugar donde él se encontraba

-no había tenido tiempo de leerla, lo siento pero quería ducharme antes de que llegaras- me disculpé

-como pides disculpas si esa ducha fue mucho mejor que el detenerte a leer esto- señaló la tarjeta

-Ey- me quejé- no la hagas menos, es importante para mí, al igual que todo lo que me das- me acerqué hacia él y le arrebaté la tarjeta y me puse a leerla, siempre era tan romántico y tierno, no pude evitar que unas cuantas lágrimas resbalaran por mis mejillas al leer sus hermosas palabras

-gracias- lo jalé hacia mí y le di un beso, pero a diferencia de los anteriores que nos habíamos dado este estaba cargado de amor, ternura y mucho sentimiento

- gracias a ti por permitirme ser parte de tu vida- dijo contra mis labios

El estar al lado de Edward era lo único que podía desear en la vida, era el complemento perfecto para mi vida

-te amo-

-te amo- le contesté


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primeraa aktualizacion en estee blog jeje .. esperoo de todo korazon ke les gusteee.. un besoo =)



LiiQaanLu =)